Historias de HealthQuest

Historias de pacientes

Ver todo

Suscríbase a nuestro boletín informativo electrónico

Ver todo

Cuidados oncológicos con compasión

Paciente de cuidados oncológicos - Reuben Paris

Durante meses, Reuben Paris of Everson luchó con síntomas que al principio pensó que eran una parte normal de su vida y de la edad. Pero sus dolores y molestias empeoraban y a la larga le ímpedían continuar con sus actividades diarias normales y sus funciones fisiológicas. Sentarse y caminar eran movimientos tan desafiantes que no podía continuar haciéndolos. "Me arrastraba sobre la alfombra por el dolor", comentó Paris. "Tenía que usar pañales, era vergonzoso. El nivel de dolor era increíble, era como una barrera; mi piel estaba muy sensible".

Paris decidió investigar y se sometió a una biopsia en febrero de 2022. Para el momento que fue a la clínica a hacérsela, ya la había cancelado anteriormente dos veces, porque estaba asustado.

"Tenía que sacarme el miedo, el susto, las probabilidades, poner las cartas sobre la mesa, asumir el proceso y confiar en que esas personas cuidarían de mí", expresó Paris acerca de cómo juntó coraje para finalmente asistir a su cita de la biopsia. "Y me cuidaron. Hicieron un trabajo asombroso".

Paris recuerda el momento de la espera para hacerse la biopsia y los cinco minutos después de llegar, el momento en el que estaba a punto de retirarse. Estaba muy asustado. Una de las enfermeras se dio cuenta, se sentó junto a él y le habló para tranquilizarlo. Paris comentó que ese fue justo el inicio del nivel de cuidado compasivo que recibió durante todo el tratamiento.

"La parte más espantosa del cáncer y de los cuidados oncológicos es lo desconocido", comentó  John Register, MD, oncólogo de radioterapia y proveedor de Paris en el diagnóstico y tratamiento. "Me aseguro de que mis pacientes sepan que no estarán luchando solos...que tendrán el apoyo de un equipo completo. Hablamos sobre el cáncer, el pronóstico, los objetivos del tratamiento con radiación, las expectativas sobre la logística del tratamiento y los posibles efectos secundarios con los que se pueden encontrar... y ponemos énfasis en que lo superarán y que se sentirán mejor después de la recuperación del tratamiento".

La biopsia indicó cáncer. A Paris le diagnosticaron carcinoma epidermoide de recto en estadio IIIB. Le dieron un pronóstico complejo con un 24% de probabilidad de supervivencia de cinco años. No obstante, Paris pronto encontró esperanza en la gente del Skagit Regional Health Cancer Care Center.

"Recuerdo que en mi primer día de radioterapia entré llorando. La mujer del escritorio me miró a los ojos y me preguntó cuál era el problema. Le dije, "nunca pasé por esto antes. Estoy un poco asustado". Me miró a los ojos, tocó mi mano y dijo "Todo estará bien, te vamos a cuidar". Paris siguió reflexionando. "Recuerdo cuánta verdad había en esas palabras. Tengo el corazón lleno de gratitud para todas esas personas y siempre lo tendré".

Paris encontró esperanza de más de una manera.

"Cuando Reuben comenzó el tratamiento tenía dolor intenso y miedo", afirmó el Dr. Register. "A medida que avanzaba con el tratamiento, se sintió más cómodo, más confiado, con más control de la situación. Entraba a los tratamientos cantando, haciendo bromas y algunas veces bailando".

Skagit Regional Health tiene un sólido equipo de profesionales que garantizan que cada paciente que padece cáncer tenga lo que necesita, ya que el tratamiento contra el cáncer es un proceso individual.

"Abordamos los cuidados oncológicos con un equipo multidisciplinario: médicos, enfermeros, orientadores, trabajadores sociales, farmacéuticos, radioterapeutas, dosimetristas, físicos, personal administrativo y de apoyo", comentó Jennifer Leseberg, jefa de radioterapeutas. "Con la asistencia de (su equipo de atención), pudimos ayudar a coordinar su horarios junto con un proveedor de bomba de infusión externa, para agilizar sus citas. También estuvimos aquí para apoyarlo emocionalmente durante su difícil diagnóstico y tratamiento".

Reuben tocando la campana

El 15 de junio de 2022, Paris terminó la radioterapia y se está curando. Ahora se puede sentar, conducir y caminar; tres actividades que le resultaban imposibles seis meses atrás. El 5 de agosto, se hizo una tomografía que indicó que el tamaño del tumor había disminuido. Su equipo de atención seguirá controlando su progreso con otras pruebas de diagnóstico por imagen.

Mirando hacia atrás, Paris sabe que la ciencia y la medicina fueron fundamentales para alcanzar resultados positivos, pero lo que siempre llevará en su memoria es el personal del Skagit Regional Health, que lo cuidaron e influyeron en su perspectiva a través de todo el proceso.

"Durante su seguimiento, él dijo que tenía un corazón y un racimo de pequeños corazones unidos, y que esos corazones eran los nuestros", dijo Molly Brown, planificadora de diagnóstico del departamento de Oncología médica.

"Me alegra mucho contar con ese equipo, estoy agradecido de que literalmente me tomaron la mano y caminaron conmigo durante este proceso", comentó Paris. "Me dijeron la verdad acerca de todo. Roma en Oncología de Radioterapia se sentó a mi lado y me explicó cómo reducir los efectos secundarios. Me abrazó y me dijo 'Todo va a salir bien".

El nivel de atención que recibió de una comunidad más pequeña también fue una agradable sorpresa para él.

"Las personas fueron muy profesionales, consideradas y minuciosas con todas las pruebas que hicieron para asegurarse de resolver el problema de manera exacta", comentó Paris. "Otros hospitales hacen eso, pero (Skagit Regional Health) va más allá. En esa primera hospitalización podría jurar que me atendieron alrededor de 20 doctores. Los profesionales te hacen sentir que realmente quieren ayudar. ¡Y la comida estuvo increíble! Les digo a mis amigos que si tengo 32 minutos para vivir y me lleva 28 ir al Skagit Valley Hospital, ¡es ahí adonde voy!"

Leseberg dijo que el gran deseo de Paris de vencer el cáncer y el apoyo diario que recibió del personal es lo que lo mantuvo en pie.

"Reuben fue un paciente extraordinario; se comprometió a seguir todos los consejos médicos que recibía", comentó Leseberg. "Cuando completó sus tratamientos, no tenía dolores y estaba mejor de ánimo que cuando llegó". "Reuben valientemente pasó por todo el transcurso del tratamiento con dignidad, humildad y un fabuloso sentido del humor que nos conmovió", dijo el Dr. Register.

Y si miramos hacia adelante, desarrolló una nueva perspectiva sobre la vida. "Siempre viví en el pasado o en el futuro", comentó Paris. "Esto fue una transformación. Estoy aquí, estoy vivo, estoy respirando. Esto me reanimó y me di cuenta de que debo vivir el presente. Ahora puedo ver el lado positivo de las cosas".