La elección del nivel adecuado de atención, en función de su lesión o afección, garantizará que usted reciba la atención médica adecuada, al tiempo que permitirá a los servicios de urgencias tratar a quienes tengan necesidades médicas urgentes.

Si está enfermo o lesionado, ¿dónde debe ir?

El consultorio de su médico de cabecera es el mejor lugar para recibir atención no urgente. Su médico conoce su historia clínica y puede atender mejor sus necesidades de salud rutinarias. Esto incluye exámenes médicos, vacunas, exámenes y control de enfermedades crónicas. Su médico de cabecera también está disponible para infecciones de oído, infecciones del tracto urinario, conjuntivitis, esguinces y distensiones, bronquitis y el tratamiento de otras enfermedades menores.

Skagit Regional Health ofrece once consultorios de atención primaria en los condados de Skagit, Island y el norte de Snohomish.  Haga clic aquí para obtener ayuda para encontrar un proveedor de atención médica​​​​​​​. 

Los proveedores de atención de urgencias tratan enfermedades y lesiones que no ponen en peligro la vida de pacientes de todas las edades. Esto incluye esguinces, distensiones, hematomas, laceraciones y posibles fracturas. Las enfermedades más comunes que se tratan en atención de urgencias son los resfriados, la tos, la gripe, los dolores de cabeza, la bronquitis, el asma, las molestias urinarias, la sinusitis, las infecciones de oído, las enfermedades intestinales, el dolor de garganta y la neumonía.

El amplio horario nocturno y de fin de semana hace que la atención de urgencias sea una opción popular para los pacientes cuyo médico de cabecera no está disponible. Skagit Regional Health ofrece servicios de atención de urgencias 364 días al año. Haga clic aquí para ver nuestros centros de atención de urgencias.

La sala de urgencias está abierta las 24 horas al día para el tratamiento de enfermedades y lesiones que pueden poner en riesgo la vida. Llame al 9-1-1 o acuda inmediatamente al servicio de urgencias del hospital si experimenta algún problema de salud grave, como dificultad para respirar, alteración del estado mental, dolor abdominal, reacción alérgica, dolor en el pecho, pérdida de conciencia, intoxicación, convulsiones, debilidad repentina en un lado del cuerpo u otras afecciones que pongan en peligro su vida. Haga clic aquí para leer más.